Hay algunos looks de Letizia que han quedado guardados en nuestra retina. Uno de ellos es el que llevó en diciembre de 2016, en la entrega de los Premios Mariano de Cavia, en el que el protagonista fue un vestido de Nina Ricci de rayas verticales, con lentejuelas en distintos tonos. Este viernes, más de cinco años después, hemos vuelto a vivir un momento como aquel, además con un diseño también de Ricci con el que la Reina se ha convertido en la cumpleañera más guapa. Y es que fue este jueves 15 de septiembre cuando Su Majestad sopló las 50 velas, eso sí, de forma privada.

Sin embargo, en el que ha sido su primer acto tras llegar a la mitad de siglo, no ha podido evitar tener que escuchar el 'Cumpleaños feliz' en el Auditorio Nacional de Música de Madrid. A su llegada, acompañada por don Felipe, el público se ha puesto en pie y la orquesta ha tocado los acordes de la famosa canción. Ella, sonriente, ha dado las gracias con las manos. Esta escena se producía en medio de la celebración de otro 50º aniversario, en este caso el de la investigación en cáncer de la AECC, entidad de la que la Reina es presidenta de honor. Así que doble festejo.

La Reina ha elegido para la ocasión un vistoso vestido de la maison francesa, repleto de lentejuelas azul noche de arriba a abajo que crean un efecto casi hipnótico. Se trata de un diseño ajustado, de manga larga, cuello redondo y cintura marcada. El modelo original lleva un cinturón joya del que doña Letizia ha decidido prescindir. El resultado es un look perfecto, al que solo pondríamos un 'pero' y es la elección del 'bra', ya que al ser de un color muy clarito con los flashes de los fotógrafos se transparentaba. No es la primera ocasión en la que a Su Majestad le pasa algo parecido.

Resulta que este vestido ya lo conocíamos los que seguimos a la realeza, por lo que nos ha sido muy fácil identificarlo. ¿La razón? Doña Letizia no es la primera royal que lo luce. También Máxima de Holanda guarda en su armario este diseño de Nina Ricci, aunque el suyo es con lentejuelas negras. La reina de los Países Bajos lo estrenó en enero de 2016, en un concierto al que acudió junto a Matilde de los belgas. Desde entonces lo ha lucido hasta en cuatro ocasiones, demostrando así lo mucho que le gusta.

Máxima decidió dejarle el fino cinturón joya que llevaba el modelo original, y en todas las ocasiones que lució el vestido de Nina Ricci lo combinó de manera parecida: con medias cristal, salones de charol negro y cartera de mano a juego.

Doña Letizia, en cambio, ha optado por complementos en ante. Unos salones azules también de Nina Ricci, que guarda en su armario desde 2015, y una cartera de mano de Magrit. La Reina ha recogido su melena en una favorecedora coleta con flequillo al lado que dejaba al descubierto los pendientes elegidos, súperminimalistas. Es cierto que el vestido ya tiene brillo suficiente, por lo que ha optado por los pequeños botones de diamantes y oro blanco. En el pasado, solía colgar de ellos las perlas australianas, pero estas llevan mucho tiempo guardadas en el joyero real.

Los días venideros serán muy moviditos para los Reyes, sobre todo para Letizia. El domingo pondrán rumbo a Londres junto a la reina Sofía para asistir a los actos relacionados con la muerte de Isabel II. Ese mismo día, está previsto que Sus Majestades visiten la capilla ardiente, instalada en Westminster Hall, y después acudan a la recepción de Estado que Carlos III ofrecerá en Buckingham, un encuentro al que no faltarán los Reyes eméritos. Al día siguiente, el lunes, de nuevo los cuatro asistirán al funeral, en la abadía de Westminster. Tras ello, el Rey y doña Sofía regresarán a España pero no Letizia, quien viajará directa a Nueva York para cumplir con actos de Unicef.

Hay algunos looks de Letizia que han quedado guardados en nuestra retina. Uno de ellos es el que llevó en diciembre de 2016, en la entrega de los Premios Mariano de Cavia, en el que el protagonista fue un vestido de Nina Ricci de rayas verticales, con lentejuelas en distintos tonos. Este viernes, más de cinco años después, hemos vuelto a vivir un momento como aquel, además con un diseño también de Ricci con el que la Reina se ha convertido en la cumpleañera más guapa. Y es que fue este jueves 15 de septiembre cuando Su Majestad sopló las 50 velas, eso sí, de forma privada.