Estilo Victoriano: La Modernidad En Lo Clásico

2022-09-24 06:36:36 By : Mr. rex fang

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Texto: Alejandra Muñoz Duarte

Los enredos familiares de la realeza siempre han despertado nuestra curiosidad. Nos preguntamos cómo y dónde viven, qué hacen, qué les gusta y, obviamente, nos gusta admirar la decoración de sus palacios y lujosas residencias. Da igual si se habla de Borbones, Grimaldi o de la misma Reina de Inglaterra, la ostentación real nos gusta y nos disgusta, pero que nos interesa, eso está claro.

Pero hoy, haremos un salto en el tiempo. De unos 200 años. Viajamos a Inglaterra, al reinado de Victoria I, y analizamos cómo es la decoración de sus palacios. Icónica, como poco, convirtió su gusto decorativo en un estilo propio que ha trascendido a lo largo de los años y que se conoce como estilo victoriano.

Como bien dice su nombre, el estilo victoriano es el estilo de arquitectura, moda, literatura y artes decorativas que se impuso durante el reinado de la reina Victoria de Gran Bretaña desde mediados y finales del siglo XIX.

Hemos de destacar, que este estilo decorativo no se hizo popular hasta que, la Revolución Industrial, permitió a las clases medias comprar muebles de corte clásico para imitar la decoración de la aristocracia.

En esa época, se consideraba que los espacios vacíos eran sinónimo de mal gusto, así que cuantas más cosas tuvieras en casa, más estilo tenías. De ahí que el estilo victoriano se rija por las leyes del más es más y del maximalismo, donde no se repara en absolutamente nada.

Durante este periodo histórico y estilístico, predominaban los colores apagados, suaves e incluso pastel. Los tonos brillantes y vivos, prácticamente, eran inexistentes, igual que las gamas más oscuras.

Precisamente, plateados y dorados recuerdan al estilo victoriano más clásico. No pueden faltar en este acabado: candelabros plateados, cubiertos dorados, una fuente de cinc sobre la mesa, un carrito auxiliar en oro suave…

Lo apostamos todo al lujo. Sí, como el oído (o leído), nos decantamos por tejidos sofisticados e incluso brillantes, como el terciopelo y la seda.

Flores y más flores. El estilo victoriano abre sus casas a la naturaleza para empapelar paredes y tapizar muebles con estampados florales. Por otro lado, las telas de estampado damasco también son muy populares en los textiles de este estilo.

El estilo victoriano no repara en excesos, por eso nunca duda a la hora de usar papel pintado en todas las paredes de una habitación. Pero ahí no termina todo, también lo usa para dar color a armarios y cajoneras.

¿Lo mejor? Que usar papeles pintados es una tendencia cada vez más presente en la decoración de hoy en día, y será un paso muy fácil para empezar a introducir el estilo victoriano en tu casa.

¿No sabéis por dónde empezar a decorar el baño para que se asemeje a uno de la realeza? Primero de todo, a menos que tengáis un baño pequeño, apostar por bañeras exentas, su simple presencia llena de lujo cualquier estancia. Rematarla con griferías doradas y si son de estilo vintage mejor aún.

El espejo es otro de los imprescindibles de cualquier baño, y en este caso, como no, apostaremos por los espejos con ornamentos en los marcos. Cuando más grande mejor, eso siempre.

El toque final lo puedes añadir con una silla clásica o Luis XV que se convertirá en el mejor perchero para un baño de estilo victoriano.

El techo es un elemento al que se dirigen las miradas por dos motivos. Uno es que se llena de molduras y rosetones, las piezas circulares ornamentadas que se colocan en el techo en el lugar donde se instala una lámpara. Y otro es que se pintan también de colores.

La pieza estrella es la clásica lámpara de araña, tanto para salones, comedores o dormitorios. Puede ser de cristales, de cuentas de colores e incluso de madera, eso sí, siempre debe colgar del techo, y aún mejor si la corona un rosetón.

Sí, en los muebles de estilo victoriano reinan las curvas, pero, atención, no curvas suaves como las de la tendencia bold, sino curvas recargadas y enrevesadas. La madera será la clara protagonista, aunque también vemos detalles de mármol y cristal. Aún queda un detalle que no podemos pasar por alto, y es el capitoné, un tipo de acolchado en asientos donde el relleno queda sujeto con botones formando dibujos regulares en relieve.  

Alguno de los muebles más icónicos de este estilo, al igual que del estilo clásico, son las sillas Luis XV, alacenas llenas de relieves o camas con dosel.

Cuantas más velas y más candelabros mejor. Si quieres decorar tu mesa al más puro estilo victoriano, tan solo tendrás que colocar un mantel XL que toque al suelo y cubrir la mayor superficie posible (sin que moleste a la hora de comer) con velas, porta velas y candelabros. El color y movimiento del fuego aportará una aura clásica y acogedora muy elegante.

Eso sí, ten en cuenta que los accesorios de mesa han de estar lacados en color plata u oro, y si tienen ornamentos y curvas mejor.

Seguro que los has visto en las casas más cool de la temporada, en casas de influencers o en las típicas casas de estilo parisino. Los espejos de estilo barroco o estilo victoriano están por todas partes, y hay do características clave que han enamorado a los decohunters: por un lado los ornamentos en los marcos y por otro el color dorado.

Hay muchos elementos que pueden convertir tu dormitorio en una suite palaciega. Si estás dispuesto a darlo todo, apuesta por una cama con dosel o con estructura clásica como la de la foto. Si, en cambio, solo quieres añadir pequeños toques de estilo victoriano, invierte en un puf de capitoné o en cojines de seda de estampado damasco.

Las ideas decorativas son infinitas: molduras en paredes, mesitas de noche de corte clásico, colchas aterciopeladas, cojines redondos con botón, etc.

Puede que las lámparas de araña te parezcan demasiado, pero hay una opción mucho más moderna para añadir ese toque de lujo victoriano a tu casa sin caer en clasicismos. Hablamos de lámparas colgantes con varias bombillas, pero con diseños modernos y líneas depuradas. Además, son una pieza de pura tendencia.

Hay muchos elementos que aportarán ese toque palaciego a tu salón, pero hay 3 claves decorativas que no puedes ignorar. Por un lado, apuesta por muebles clásicos, con relieves, curvaturas y, si puede ser, de madera. No pueden faltar los estampados florales, tanto en papeles pintados, en alfombras, cojines, plaids o incluso añadiendo flores naturales. Y, por último, el tercer elemento son los detalles dorados y plateados, tanto en lámparas, candelabros, mesitas auxiliares o piezas decorativas.

Decorar las paredes con cuadros es otro de los elementos clave para una casa de estilo victoriano. Podemos decorarlas con cuadros de paisajes, retratos clásicos o versiones modernas de los lienzos victorianos. Por ejemplo, este cuadro de Really Nice Things versiona un retrato clásico pintando flores sobre el rostro.

Los marcos de tus obras marcarán la diferencia, y, al igual que con los espejos, si son con ornamentos y de color dorado mejor.

Los pufs de terciopelo también pueden convivir en espacios de estilo moderno. Serán la nota clásica y sofisticada que hará un guiño a la decoración de estilo victoriano.

Como no es tan fácil poner una chimenea, a no ser que la casa cuente con ella, basta con una embocadura en la pared, fijada y pintada. Dentro puedes colocar una de bioetanol, libros apilados o unas cestas con mantas.

Alejandra Muñoz es licenciada en Periodismo y también estudió Decoración e Interiorismo. Su pasión es todo lo que tenga que ver con la comunicación y la decoración. Además de pasarse el día escribiendo, se dedica también a la decoración de eventos e imagen corporativa, así como a impartir talleres sobre decoración, comunicación, educación y cocina, mundos a los que está "enganchada". En redes, como loca por la fotografía, la puedes encontrar en @alterandme

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